jueves, 15 de octubre de 2009

El puertorriqueño

El puertorriqueño que Manuel A. Alonso presenta en su poema El puertorriqueño es parecido al puertorriqueño de nuestra época en ciertos aspectos, pero en otros, me parece que ha cambiado. Yo considero que como puertorriqueños somos buscadores de la gloria, el éxito y nos afanamos grandemente por el día a día. Además, pienso que solemos ser muy enardecientes en nuestro modo de pensar y actuar, especialmente en las disputas políticas o religiosas. Obviamente, haciendo la salvedad de que no todos somos así.
Por otro lado, creo que en el aspecto de los rasgos físicos, no podemos dar un significado exacto de lo que es un puertorriqueño. Somos procedentes de una fusión de tres razas y cada puertorriqueño es muy diferente a otro. Yo pienso que las características físicas en nuestra isla no son como en otros países donde las personas se ven bastante parecidas en sus rasgos. Aquí en Puerto Rico tenemos desde rubios con ojos claros hasta personas bien morenas. Por lo tanto yo difiero del poema de Alonso en la estrofa que describe al puertorriqueño físicamente.
También opino que el amor insuperable que se le tiene a la patria no se compara con el que se mostraba en otros tiempos. Para mí, algunas personas no valoran nuestra patria, esa identidad que nos define y todo aquello que nos distingue de otras culturas. Como nuestra historia, costumbres, ideales, tradiciones, idioma, entre otras que poco a poco se han dejado al olvido. Considero que esta imagen del puertorriqueño de Manuel Alonso no es la real en nuestra época.

No hay comentarios:

Publicar un comentario